Fórmula 1
29 años sin Senna: el día que se convirtió en héroe ante su gente
Un 24 de marzo, pero de 1991, Ayrton Senna logró una de sus victorias más épicas dentro de la Fórmula 1 en el Gran Premio de Brasil. Lo recordamos a 29 años de su partida.
- Senna y el día que fue un héroe ante su gente
-
F1: el inesperado cambio que afectó a varios pilotos y sus redes sociales
-
El día que Senna ganó por primera vez en F1 bajo la lluvia de Estoril
-
El día que Senna compartió un podio con Fangio
Se cumplen 29 años de la trágica partida de Ayrton Senna luego de sufrir un fuerte accidente durante el Gran Premio de San Marino de Fórmula 1 en 1994. El piloto brasileño tuvo grandes triunfos que quedaron en el recuerdo, como el que logró el 24 de marzo de 1991 ante su público.
Leer además: El día que Senna compartió un podio con Fangio
Ayrton Senna logró muchas victorias que quedaron en el recuerdo de los fanáticos a lo largo de su exitoso camino en la Fórmula 1. Una de ellas se dio el 24 de marzo de 1991 en el Gran Premio de Brasil.
Llegaba la segunda cita del calendario 1991 en Brasil, Ayrton Senna tenía en sus espaldas una mochila pesada. En los ocho años que llevaba en la Fórmula 1, nunca había podido ganar en el Gran Premio que corría de local. Pero esa racha un día se cortó.
Senna largaba desde el mejor cajón de partida, todo el tránsito de la carrera había sido normal. El brasileño lideraba con comodidad sobre sus inmediatos perseguidores. Pero a siete vueltas del final un problema en la caja de cambios del McLaren-Honda MP4-6 lo dejaba solo con la sexta marcha. Pero nada iba a detener el sueño de Senna de ganar en su país.
En esos siete giros, el piloto paulista hizo un esfuerzo descomunal para adaptarse rápidamente a las condiciones del auto. Cuando cruzó la bandera a cuadros en primer lugar, los auxiliares de pista le acercaron la bandera de Brasil que solo pudo sostenerla unos metros, ya que se le había acalambrado el cuello y los brazos.
Leer además: Checo Pérez ganó y celebró en Bakú: “El ritmo fue muy bueno”
La gente en las tribunas desbordaba de felicidad, gritando por su ídolo. La primera victoria de Ayrton en casa, no pudo ser más épica, emocionante y emotiva.
