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Fiat Brío, más austero imposible
En el año 1987, Sevel Argentina sacaba al mercado el Fiat Brío. Un auto económico fabricado por una decisión del gobierno nacional de producir autos para el pueblo argentino.
La primera versión, el Fiat VAE (Vehículo Argentino Económico) era tan estándar que ni siquiera tenía asiento trasero. La idea gunernamental era que fuera el primer auto para muchos de los argentinos.
El Brío tenía en sus entrañas muchas cosas del Fiat 147 pero otras le faltaban, era más parecido al modelo 127 que nunca llegó a nuestro país. Fue el único de toda la gama Fiat 147, fabricados en Argentina, que tuvo una trompa cuadrada con un diseño bastante antiguo.
Venía con un motor de 1.116 cm3 con una potencia de 53 hp. Traía caja de velocidades de cuatro marchas sincronizadas hacia adelante y marcha atrás. Era realmente económico ya que con un tanque de nafta se podían recorrer más de 600 km.
En su interior estaba su punto más flaco. Los tapizados eran lo más básico posible. El tablero de tamaño muy reducido, estába montado sobre un panel de chapa estampada en color negro semi mate. Constaba de velocímetro y de cuatro indicadores lumínicos de nivel de nafta, presión de aceite, temperatura y alternador / batería. Nada más.
A la izquierda de la columna de dirección y abajo, se ubican varias teclas. En los extremos la luz de giro y en el sector central las luces de posición, altas / bajas, limpiaparabrisas (dos velocidades) y accionando las de giro en forma conjunta se logra que cumplan la función de luz de estacionamiento (balizas).
El cebador manual está abajo a la derecha del volante y el lavaparabrisas (manual a botón) allá abajo en posición poco ortodoxa e inadecuada.
La parte trasera del pequeño Brío también mostraba falencias, apenas con una alfombra de goma y sin bandeja que lo cubriera. En definitiva, como todos los autos del mundo, el Fiat Brío, tenía sus pro y contras. El Brío era económico en lo que ha consumo se refiere, ágil en el tránsito y de adecuada velocidad final y habitabilidad para su segmento.
Su calefactor no era de los mejores pero cumplía con lo mínimo, las insonorización insuficiente, teclas de comando mal ubicadas, lavaparabrisas de difícil acceso e instrumental muy básico. A pesar de ser un auto extremadamente económico no fueron muchos los que se vieron por las calles de Argentina.
Un "autito" rendidor, de fácil mantenimiento y muy noble. Nuestro recuerdo en Industria retro para un vehículo que para muchos fue su primer auto.