Julián Santero ganó la clasificación pero por cambiar el motor pasó al puesto 16. Diego Ciantini, que había terminado segundo, la heredó. Acá lo que dijeron
Julián Santero pasó un sábado muy particular. Cuando arrancó la actividad del Turismo Carretera, con el primer entrenamiento, su motor se rompió y todo se complicó. Más allá de ese golpe duro el equipo y el piloto de Mendoza no bajaron los brazos. Trabajaron incansablemente para poder llegar al segundo entrenamiento y lo lograron. Más tarde tuvo su premio. Ganó la clasificación y demostró que su Ford está competitivo. Lo malo es que debió penalizar y pasó al puesto 16. Diego Ciantini, que había terminado segundo, heredó ese lugar y el domingo largará primero en la primera serie. Luego de lo realizado, ambos dialogaron con Carburando y sobre lo sucedido comentaron lo siguiente.