Turismo Carretera
25 años de la última en ruta
Lalo Ramos tuvo el honor de ganar hace 25 años la última carrera en un circuito rutero cerrando un capítulo más que importante en la historia del automovilismo nacional
Hace 25 años se corría la carrera 892 de la historia de la ACTC.
Para muchos era una carrera más y lejos estában de pensar que esa carrera pondría fin a una rica historia del TC, el automovilismo nacional y de nuestro país.
Se corrió por las rutas de Santa Teresita un 16 de febrero de 1997. El triangulo estaba formado por la ruta 11 y dos caminos vecinales.
En aquel momento era un comienzo de temporada como tantos otros, pero con la particularidad que la categoría más popular, había anunciado que, la del “Triángulo del Tuyú”, sería la única fecha en circuito semipermanente de esa temporada.
Nadie suponía que de “única” pasaría a ser “última”.
Desde los accidentes fatales de Roberto Mouras y Osvaldo Morresi en 1992 y 1994 respectivamente, no eran muchos los circuitos ruteros que brindaban seguridad para el piloto y para la gente.
Una carrera especial además porque se estrenaban cambios reglamentarios. Se mejoraron los frenos, se corrigió cilindradas, se aumentó el alerón trasero y se homologó la caja de 5 velocidades.
En lo deportivo Fabián Acuña se pasaba de Ford a Chevrolet, tripulando una Chevy prestada por el Juan María Traverso.
“Cocho” López hacía lo contrario pasando de Chevrolet a Ford.
Y tal vez lo más resonante era que Alberto Canapìno ya no estaba con el Campeón Traverso (incorporaba a Christian Avila), y formaba su propio equipo con sendos Chevrolet manejados por Guillermo Ortelli y Luis MInervino.
Las series fueron todas de Ford. Tito Urretavizcaya, Omar Martínez y Lalo Ramos no tuvieron inconvenientes para cruzar primero por tiempo neto la línea de sentencia.
La final se retrasó por la invasión de público.
Urreta con el Ford de Correo Argentino volando encima de las chicanas ganaba con comodidad aquella final.
El duro castigo de Tito contra los pianos le hicieron romper la goma y con ello perder la carrera.
Heredó la punta “Lalo” Ramos pero el Flaco Traverso con la Chevy violeta le manoteó la punta por una vuelta y media.
La victoria finalmente fue para “Lalo” con el Falcon del equipo Vermen (Ex Fineschi y Walter Hernández).
Un triunfo que con el paso de los años vale casi como un campeonato.
Ese triunfo cerró una de las historias más brillantes del deporte motor en Argentina, con aquel TC que históricamente inauguró caminos y rutas.
Nadie aquel domingo imaginó que verían por última vez a un auto de TC a fondo por una ruta abierta.
Nadie lo imaginaba y yo tampoco.
Nunca pensé que aquella propuesta de Don Isidro Gonzáles Longhi para que reemplazara al genial “Mono” Gagliardi me iba a permitir tener el honor de volar en el último avión de Carburando.
