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El autódromo de Posadas vive una calma que desespera
El Coronavirus puso en pausa al automovilismo nacional y la incertidumbre ya es moneda corriente entre todos los actores del deporte. Los autódromos no son la excepción, ya que varios comienzan a sentir la falta de ingresos y la necesidad de que vuelva la actividad es cada vez mayor.
Al igual que el autódromo de Alta Gracia, el de Posadas ya empieza a sufrir la crisis en sus arcas, las que vienen golpeada tras el temporal que los azotó en marzo. “Obviamente que sigue todo parado, no hay actividad y estamos manteniendo lo mínimo e indispensable. Además, padecimos algunos actos de vandalismo y robos menores. Pero salvo el puente, después reparamos todos los otros daños que nos generó el tornado y para arreglar la pasarela que se cayó en el ‘Carrusel’ tenemos que acomodar nuevamente el presupuesto y ahora no podemos tener gente trabajando para solucionar este tema", indicó el presidente del Automóvil Club Posadas, Carlos Malarczuk, a Carburando.
Con vistas a poder palear el déficit, Malarczuk aseguró que necesitan recuperar las pruebas privadas. “Estamos a la espera de que se habilite a nivel nacional la actividad y podamos empezar con alguna prueba. Gente del automovilismo zonal y de karting nos han hecho el pedido para poder girar. Pero estamos en pausa y supeditados a cómo se vayan dando las cosas para el deporte motor”, afirmó.
A la hora de analizar el impacto económico que genera los efectos colaterales del COVID-19 en la institución, el dirigente misionero fue tajante con su apreciación. “Esta situación nos perjudica de inmediato porque nosotros vivimos de los ensayos diarios que tenemos en el autódromo. Tampoco tenemos la actividad zonal y del karting, por lo que es un parate total”, sentenció.
Y agregó: “Además, nosotros tenemos que tener un mantenimiento mínimo para que el circuito esté en condiciones, por lo que los gastos fijos siguen corriendo. Por eso entre los integrantes de la Comisión Directiva estamos cubriendo las distintas cosas que tenemos que pagar. Llegado el momento buscaremos hablar con el Gobierno para ver si podemos conseguir algún tipo de ayuda. Pero sabemos que hoy las prioridades son otras y nosotros la vamos llevando como podemos”.
Por último, Malarczuk señaló que más allá de las opciones que plantean para subsistir, hoy no les queda más remedio que aguantar. “Hemos planteado distintas ideas, pero al no poder moverse la gente no podemos hacer ninguna planificación. No tenemos otra alternativa de bancar este déficit hasta que por lo menos no dejan hacer pruebas. La intención es montar un protocolo sanitario que nos permite tener nuevamente a los autos girando en el autódromo”, finalizó.