La estructura llega a la máxima categoría de la ACTC de la mano de Mariano Werner. El entrerriano decidió liberarse de algunas responsabilidades y por ese decidió que su Ford sea atendido por el DTA. Varios mecánicos que trabajaban con él se sumaron a la escuadra encabezada por Armellini. La motorización seguirá a cargo de Marcelo Esteban.
A su vez, se está trabajando mucho en los Fiat Tipo que ingresan por primera vez al Súper TC2000. Para el DTA es un cambio significativo después de haber representado por muchos años a Peugeot dentro de la categoría. El mismo Werner, Fabián Yannantuoni y Matías Muñoz Marchesi serán los encargados de manejar los autos de la marca italiana.
“Es una satisfacción que Fiat haya confiado en nosotros, que Mariano haya confiado en nosotros, incorporarnos al Turismo Carretera. Esperando con ansias la primera carrera de febrero para medirnos a ver dónde estamos y para empezar a aprender”, señaló Armellini en la visita que Carburando hizo en el taller.
A su vez, sobre la curiosidad, que no se da habitualmente, que en un taller convivan autos del TC con Súper TC2000, Armellini indicó: “Están separados. La estructuras comparten la chapa, la pintura, el adhesivo, las máquinas, herramientas, la freza, el torno, la soldadora. Gran parte del taller se comparte. Cuando se trata del armado ambas estructuras son separadas y mucho más específicas para cada categoría”.
Por último planteó los objetivos para este año tanto en una categoría como en la otra: “En el Súper TC2000 hemos renovado la motivación, el empeño, la terminal. No pelear el campeonato hasta la última carrera sería un fracaso. Lo hago extensivo para el Turismo Carretera. Hay un montón de variables que van trastocando el resultado final, pero no arrancar con las cartas en regla para pelear el campeonato hasta la última fecha sería un fracaso”.