Turismo Carretera
TC: un día como hoy, el automovilismo argentino volvió en medio de la pandemia
Hace exactamente tres años, el automovilismo argentino volvía a acelerar en medio del Covid-19. El TC abría el camino del regreso con una doble fecha en el autódromo de San Nicolás. Recordamos ese momento y todo lo que pasaba en esos días.
La historia indica que un día como hoy, 12 de septiembre del año 2020, el automovilismo volvía a acelerar luego de varios meses de inactividad producto de la Pandemia del Covid-19. Este deporte fue el primero en retornar en nuestro país bajo estrictos protocolos de sanidad y, obviamente, sin público.
El Turismo Carretera se convirtió en la categoría que abrió el camino con una doble fecha en el autódromo bonaerense “San Nicolás Ciudad”, tras 187 días de parate en donde los pilotos, equipos y gente común debimos ponerles un freno a nuestras actividades por el bien personal y común.
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Hasta ese momento, el TC había disputado dos fechas en la temporada. La primera fue en Viedma (el 18 de febrero, con victoria de Facundo Ardusso), y la segunda en Neuquén (el 8 de marzo, con triunfo para Juan Cruz Benvenutti).
San Nicolás se convertía en un lugar histórico después de tanto tiempo sin ruido de motores. Los protagonistas vivían días de mucho entusiasmo y mostraban en sus redes sociales cómo se preparaban para el regreso.
Algunos compartían momentos armando el bolso para viajar, otros despidiéndose de sus familiares debido a que el ingreso a los autódromos era muy reducido y tenían que viajar sin los seres queridos, otros lo hacían en pleno viaje desde sus vehículos, algunos instalados en los boxes recién arribados o sentados en la butaca del auto casi con la alegría de un niño, entre otras secuencias que eran normales y habían dejado de serlo. Todos con algo en común además de la pasión: el barbijo o máscaras para protegerse del fuerte virus que tantos inconvenientes trajo.
Hasta la reunión de pilotos debió modificarse porque justamente eso, reunirse, estaba prohibido en esos tiempos. Por tal motivo todo se hacía mediante videollamadas. Una vez en el escenario de la carrera, todos quedaban dentro de la famosa “burbuja”. Desde el día jueves previo, nadie podía salir o entrar durante todo el fin de semana como lo hacían antes y quien no cumplía con eso sería expulsado de la fecha.
Pero previo a eso, todos (autoridades, pilotos, mecánicos, periodistas y todo personal que ingresaba al autódromo) debían pasar por una prueba fundamental: El hisopado. Los casos sospechosos o confirmados, tendrían un lugar de aislamiento.
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Así se vivía la previa del regreso del Turismo Carretera en medio de la Pandemia del Covid-19:
“Difícil poder explicar la sensación y la alegría de poder manejar un auto de carrera después de seis meses”, decía Christian Ledesma. “Cuando más emoción sentí fue cuando venía a la carrera, me trajo mucha nostalgia de como extrañaba todo esto”, comentaba quien erá el campeón defensor, Agustín Canapino. “Más allá de nuestra pasión, agradecido a toda la gente que está acá”, señalaba Mariano Werner haciendo referencia a los trabajadores del TC.
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A la hora de correr, ese fin de semana se completaron dos finales. Mariano Werner (Ford) lograba imponerse en las dos clasificaciones.
Al momento de disputar las series, el entrerriano se quedaba con la primera, Nicolás Trosset se imponía en la segunda y Valentín Aguirre (Dodge) en la tercera. La primera final, que se corrió el sábado 12, terminó en poder de Trosset, a bordo de su Dodge.
En la fecha siguiente fecha, que se corrió al otro día, Agustín Canapino (Chevrolet) lograba el triunfo en la primera batería, Valentín Aguirre lo hacía en la segunda, mientras que Gastón Mazzacane ganaba la tercera con el Chevrolet. La final sería para Aguirre con el auto del JP Carrera.
