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Suiza: la increíble subasta de autos de lujo confiscados
Algunos memoriosos recordarán el caso de Teodoro Nguema Obiang, hijo del dictador de Guinea Ecuatorial y vicepresidente del mismo país durante varios años. Este hombre tenía tal obsesión con los coches de lujo, que la justicia suiza, tras condenarlo por corrupción y confiscar sus bienes, está subastando su inmenso patrimonio automovilístico por partes.
Lo que contamos en esta nota son detalles de la una nueva subasta de hypercars, la tercera, y en efecto, su dueño no es otro que 'Teodorin' Obiang, como se le conoce más popularmente. A sus 47 años este mandatario de una república africana de 740.000 habitantes atesora estos Bugatti Veyron, Koenigsegg One:1, Lamborghini Veneno Roadster y McLaren P1, o lo que es lo mismo, cuatro de los automóviles más rápidos, sofisticados y exclusivos de cuantos se han producido en los últimos años.
Esta subasta, tal y como recoge Associated Press ha conseguido una recaudación total de 27 millones de dólares, poco más de 24 millones de euros.
Los vehículos se organizaron en 25 lotes vendidos por la casa de subastas Bonhams e incluían un Lamborghini Veneno de 2014, blanco y crema, que finalmente consiguió 8,4 millones de dólares, más de 7,7 millones de euros. El superdeportivo está practicante nuevo dado que tiene en su marcador 325 kilómetros. Hay que recordar que sólo se fabricaron nueve unidades de este coche que es capaz de alcanzar los 359 km/h.
La subasta se celebró en el club de golf Domaine de Bonmmont y también incluyó un Ferrari Enzo de 2003 vendido por 3,1 millones de francos suizos, y un Koenigsegg One 1 de 2015 que consiguió 4,6 millones de francos. Por su parte la limusina blindada Rolls Royce Silver Spur de 1998 fue vendida por 86.250 francos.
Los ingresos totales de la venta, una vez descontados impuestos, han sido de 18,7 millones de dólares (17,1 millones de euros) que serán destinados a causas benéficas en favor de la población de Guinea Ecuatorial.
Esta subasta se ha producido una vez que la fiscalía de Ginebra anunciara en febrero que ya estaba cerrado el caso contra Teodoro Nguema Obiang Mangue, hijo del presidente del mismo nombre que lleva en el poder desde 1979.
Sólo con lo que cuestan cuatro de estos vehículos se podría alimentar a la población de todo el continente africano durante varios años pero lejos de venderlos, Obiang los tenía perfectamente gaurdados en el garaje del aeropuerto de Cointrin, en Ginebra (Suiza), cuando la policía suiza los confiscó.