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Renault 9: un "Guerrero Urbano"
En Argentina, el Renault 9 se inició en 1987, como compañero del R 11 pero con baúl.
La fabricación de estos productos del Rombo de realizaban en Santa Isabel, Córdoba.
De alguna manera, primero con 11, y posteriormente con el 9, Renault reemplazaba al exitoso R 12.
De mecánica confiable, simple, y económica, estaba equipado con el motor tipo Sierra o Cléon-Fonte de 1397 cc con 60 hp en las versiones TL/GTL, 72 hp en los TS.
En cuanto a su equipamiento, era muy completo, incluso comparable con vehículos del segmento superior.
El talón de auíles en los R9/11, era el tablero, que se degradaba rápidamente con los rayos de sol, tornándolo al plástico que lo cubría muy quebradizo, principalmente del lado derecho, por encima de la guantera.
Desde el año 2003, una empresa de Rosario, Santa Fé, fabrica una réplica de dicho tablero, con la misma textura y color que el original, tal es así que este repuesto fue adoptado por Renault Argentina como recambio original, siendo ésta la opción de reemplazo por excelencia.
En 1987, se presenta la novedad mas importante de la gama y es la presentación del R-9 en versión TS y TSE.
Al poco tiempo se incorpora el nuevo motor 1.6 de 1500 cc.
A partir de 1990, se presenta la denominada Fase II. Con la misma, toda la gama 9/11 pasa a equipar el motor 1.6 y se adopta la reestilización aplicada a la gama en Europa unos años antes.
El noble Renault 9 se fabricó hasta 1997 con más de 140.000 unidades en 10 años de producción.
Tanto el R-11 como el R-9 fueron sucedidos por el Renault 19.
Sin dudas el Renault 9 fue uno de los grandes autos de batalla de nuestro país en la década del 90.
En competición no tuvo demasiada aceptación.
Solo se recuerda aquel proyecto que realizó en su fortaleza Oreste Berta, que finalmente no properó.
El R9 de Berta pesaba sólo mil kilos y tenía un tratamiento aerodinámico espectacular para la época.
Lo más interesante: llevaba el motor en posición central.
Era un 2.0 derivado del 2.2 litros que usaban los Renault Fuego y R18 de esa época.
Con la preparación de Berta, superaba los 200 caballos de potencia.
La propuesta de Berta de reemplazar a los TC2000 con este tipo de autos no prosperó.
Tampoco se llevó a la práctica la idea de una copa monomarca, para acompañar a esa categoría.