Dakar
El Citroën 2CV que se robó todas las miradas en el Dakar 2024
Una tripulación checa compitió con el tradicional vehículo dentro de la divisional Classic.
- Las dos mujeres que manejaron el Citroën finalizaron en el puesto 63.
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El Dakar Classic es una de las divisionales que tiene la carrera más difícil del mundo. La misma se creó hace poco tiempo y en la ella compiten diferentes joyas mecánicas. En la edición 2024, la presencia más llamativa de esta categoría fue el Citroën 2CV que tomó parte de la prueba y pudo llegar al final de la misma.
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El tradicional modelo de sólo 2 caballos de potencia fue tripulado por las checas Barbora Holicka y Lucie Engova, quienes eligieron la unidad para rendirle homenaje debido a la popularidad del auto en sí. Holicka fue la impulsora de este proyecto debido a la participación en distintos rally de su país y tras no poder costear una oferta del ZX Rallye-Raid, decidió, tras la idea de un amigo, adquirir un Citroën de 1979.
La máquina con el número 712 recibió algunas reformas de manos de Tomás Neruda para reformar distintos aspectos y todos los elementos que anexo fueron provenientes de otros vehículos de la marca francesa como el Mehari o la Berlingo.
Fuera de la experiencia personal de Holicka en el deporte motor, su navegante Engova es quien la metió en el mundo del rally raid y también la que le hizo conocer el campamento cuando la invitó como visitante en la edición 2023. Además, Lucie es de familia fierrera, ya que su padre Bretislav llegó a ser piloto oficial BMW en campeonatos de turismo durante los 1980 y su hermano es Tomas Enge, único checo es correr en la Fórmula 1 al disputar tres Grandes Premios con el equipo Prost en 2001.
Más allá de lo pintoresco del modelo, el Citroën 2CV de Holicka y Engova tiene dos rasgos distintos. El es primero es su decoración de calidoscopio, estética que fue pintada por el artista pop checo Josef Rataj, mientras que el otro es su apodo, ya que el auto fue nombrado bajo el mote “Duckar” (Pato) por la forma en que se mueve la unidad.