La Otra Mirada
Vuelve La Otra Mirada, con la historia del Renault 12
Hace 50 años, comenzó la comercialización del Renault 12 en la Argentina y se transformó en un clásico; mirá el video y conocé su historia.
Tiene tanta identidad argentina, que pocos recuerdan su acento francés. Fue el “mediano” para todos los talles. Y las calles se llenaron con sus líneas. Confiable, espacioso, de generoso baúl, motor chico, práctico y con estilo moderno. Más de Medio siglo después de su producción nacional, es uno de los grandes clásicos de la industria argentina: el Renault 12
En mayo de 1971 comenzó la comercialización del llamativo modelo producido en la planta de Santa Isabel, en la provincia de Córdoba. En realidad, antes Renault había comenzado el proyecto 117, que finalmente vio la luz en 1969, en la presentación oficial del Salón del Automóvil de París.
Un concepto distinto para la marca francesa, con disposiciones inéditas respecto de sus modelos anteriores, como los Renault 4, 6, 8 y 16. La concepción del coche, diseñado desde el principio como un modelo de carácter universal y que pudiera producirse también en países que por aquel entonces se iniciaban en el mundo de la fabricación y el montaje, fue un éxito. Se convirtió en el modelo francés más vendido de la historia.
En mayo de 1971, IKA-Renault lanzó el Renault 12 en la Argentina. Se basaba sobre el modelo TL original, aunque con algunos detalles, como la defensa en los paragolpes y los ventiletes en las puertas delanteras.
Se presentó con un motor de 1300 cc y una potencia de 82 caballos. En 1973 apareció la versión break o familiar y en 1974 se hizo el primer restyling. En 1976 apareció la modificación más importante. Surgieron las versiones TL y TS. En 1978 nació el modelo más deportivo y exclusivo de la versión argentina, el Renault 12 Alpine. Se fabricaron unas 493 unidades. Con un motor de 110 caballos, la fisonomía bien deportiva se caracetrizaba por las franjas laterales y la inscripción Alpine.
Mientras que en Francia se dejaba de producir, en 1983 junto con la llegada de la Democracia se reinstalaba en la Argentina al R12 con otro restayling. Un año después se apostó por la versión GTS, la más completa, y luego salió la más económica, Renault 12 L, a raíz de una decisión gubernamental por aquel entonces. Era tan económica que ni siquiera tenía luz blanca trasera de marcha atrás. Tras las apariciones del GTL y del TL, finalmente en 1984 salió de la línea de monataje el último Renault 12 argentino.
En el automovilismo no tuve grandes logros. Con el Alpine, el cordobés Jorge Recalde ganó el Rally Camino del Inca, en Perú, en 1979. Pero el triunfo más relevante logrado por el Cóndor de Traslasierra con un Renault 12, fue en 1978, con un TS, cuando se impuso en la Clase B de la Vuelta de América del Sur, tras más de 30.000 kilómetros.
En el mundo se fabricaron más de 5.000.000 de unidades si se toman todas las versiones y marcas involucradas. Además de Francia, obviamente, y la Argentina, se produjeron Renault 12 en Australia, Sudáfrica, Canadá, Colombia, Venezuela, Chile, Uruguay, México, Irán, Costa de Marfil, España, Irlanda, Madagascar, Marruecos y Portugal.
Fue tal el éxito del Renault 12 en la Argentina que el 15% mundial corresponde a su fabricación, con un total de 444.045, ubicándose en el podio de aquel entonces con el Peygeot 405 y el Ford Falcon.
Desde Córdoba se exportaron unidades y se contribuyó para sus hermanos gemelos: el Dacia 1300, en Rumania, y en Brasil, a través de Ford. Sí, tal cual, Ford tuvo su Renault 12, mediante el modelo Corcel.
Vehículo familiar, taxi, y muchas versiones más, el Renault 12 es parte de la historia automotriz nacional y sin dudas, entró directo al corazón de los argentinos.
